No acostumbro escribir sobre lo que me pasa, pero esta vez haré una excepción. Primero, tengo que decir que Joe Satriani es virtuosismo puro y no tendría que haber discusión alguna. Segundo, nuestra añorable Miss Silvia regresó y eso es digno de comentarse.
La verdad es que tampoco estoy muy cómodo con su regreso, pero bienvenido sea (celebra David, laméntate Duhvid) .
El colegio había perdido esa mística que lo envolvía antes, mística en la que la Miss Silvia tenía mucho que ver, pero también era importantísimo la gente de ese tiempo, ahora el colegio está podrido.
Por una parte, ya me había acostumbrado a hacer lo que quería en el colegio (pisaba el pastito, me dejaba crecer el pelo 2 centímetros más, insultaba a la Miss Jenny) ahora con la Miss Silvia al costado volverán mis épocas de rebelde frustrado. Los años de primero-segundo de secundaria en los que, siendo un granuja imponía mi ley de ir despeinado al colegio, quizás expresando mi disconformidad con el sistema que nos maneja o simplemente mi descomunal flojera y descuido (ahí es cuando vale la pena ser Satch), en todo caso, en esos días no expresaba mi disconformidad con total libertad, porque siempre había un "Hey tú" que me detenía y me dejaba helado, era la Miss Silvia y su peinado afro que nadie podía tomar como desorden.
Al fin y al cabo uno de los ganchos que tenía el colegio era la miss Silvia y su "Educación por el movimiento" que Pepe se había encargado en transformar en "Educación por los campeonatos de fútbol" y eso sin duda va ser provechoso para sus arcas.
Finalmente, tengo que decir que no me veré tan afectado por este retorno, ya que este será mi último año en el colegio Jean Le Boulch y seguramente (si es que noviembre se vuelve un mes glorioso) no extrañaré nunca más. Bueno, eso es todo lo único que me queda por decir es "Joe es mi papá!"
No volveré a escribir...
Hace 13 años.
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